Reproducimos aquí la carta publicada de nuestra asociación en los medios a principios de febrero. Para ilustrarla mejor, es conveniente recordar el contenido de nuestra postura respecto a las actuaciones en el río, y sobre todo lo relativo al proyecto de centro de interpretación del Tajo, publicadas ya hace casi un año en la web “Soy de...”. Pueden leerla en el siguiente enlace:
En la entrevista que se hace a nuestro alcalde, Javier Rodríguez Palacios en el semanario “Puerta de Madrid” del 13 de enero, éste da unas respuestas muy optimistas con las que nos entra la duda de si responden a una realidad futura que ha de cumplirse o están en clave electoral, dada la cercanía de las elecciones municipales.
Cierto que en su mayoría son un regalo para los oídos, porque mientras que en gran parte de los informativos a nivel nacional solamente hay noticias negativas y de enfrentamientos entre los políticos, aquí se habla de actuaciones que se están llevando a cabo y otras que están en proyecto, con las cuales sí se quieren augurar mejoras para los alcalaínos.
La nueva forma de presentar los proyectos: sin gente |
Con respecto a lo que se está haciendo con el rimbombante nombre de “renaturalización” del río Henares y su entorno, ya hemos manifestado al concejal de medio ambiente (ver nuestro boletín nº 87 pág. 16) nuestro parecer de que es una actuación antinatural, y aunque el compactado final quede más vistoso que el camino del que ya disfrutábamos antes, no es menos cierto que ha sido un atentado a la naturaleza. Puede ser que a los ciudadanos les guste cómo ha quedado para pasear por él, pero debemos considerar la importancia imperiosa de respetar la naturaleza, en este caso el corredor ecofluvial, porque cada vez comprendemos más lo esencial que es para la supervivencia de las especies y para la nuestra misma. Y lo que han hecho se acerca demasiado a un parque urbano y desnaturaliza la ribera del río. Se ha hecho una pista de zahorra sobre una vía pecuaria, la de la Esgaravita (que, por cierto, no está señalizada y que está legalmente protegida… en los papeles).
Los paseantes agradecerán, aunque sea excesiva, la dotación de bancos para sentarse y las papeleras a su lado, así como los dos miradores y la pasarela en madera para pasar a la ermita del Val, pero podría haber sido algo más modesto y de menos ostentación. Con los árboles que han apeado en la ciudad se podrían haber hecho ese mismo número de asientos, algo más acorde con el entorno: hace un tiempo ya lo hicieron en ese espacio.
Puede que sea agradable a la vista, pero tampoco es natural la plantación de pequeños arbustos por todas partes, que parece van a mantener con agua potable a juzgar por ese entramado de tubos de riego que han montado, ya veremos. Tampoco creemos adecuada la plantación de otros árboles en la ribera del río, pues ya vemos toda la vegetación natural (arbustos y árboles) que crece en ese entorno sin que sea precisa intervención alguna ni necesite riego estando junto a un río.
Dejemos a la naturaleza que actúe por su cuenta: no hace falta “recuperarla”, solamente protegerla de la invasión de especies como el ailanto. Deberíamos atender a la opinión de los expertos en ecología y procurar que el río se mantuviera lo más natural posible, porque es un ecosistema fundamental que todos debemos preservar. Disfrutar del río y su ribera nunca justifica convertirlo en un parque urbano. Si atendiéramos solo a la comodidad y el gusto de los ciudadanos ya no habría río, ribera ni cerros ni nada.
En cuanto a la limpieza del Caz, se había pedido varias veces en propuestas debatidas en la Junta Municipal del Distrito V en 2011, 2013 y 2016: “Limpieza y aumento del caudal del Caz” y que siempre fueron rechazadas, bien porque nos decían que ya estaba limpio o que los técnicos no veían su limpieza por estar asociado al ecosistema del Caz. Su deterioro, suciedad y malos olores, en un sitio de tantos paseantes como es la Isla del Colegio, desdice mucho de una ciudad Patrimonio de la Humanidad. No sabemos si esta limpieza perjudica mucho a la biodiversidad; se supone que en la misma se habrá tenido en cuenta que el limo sirve de sustento para la flora y la fauna del Caz y estaría bien restituir los anfibios que desaparecieron de la zona (estos ayudan al ecosistema ya que se alimentan de insectos).
Por último, hace pocos días nos desayunamos con su nuevo anuncio respecto al molino Borgoñón, o de Cayo. Nos sorprende que de pronto se anuncie su remodelación y en un proyecto tan ambicioso (centro de interpretación de la naturaleza y de la molienda), siendo que no hace tanto, cuando desde nuestra Asociación proponíamos que se instalara allí el centro de interpretación del Tajo, argumentaron que no se podía porque era una zona inundable. ¿En tan poco tiempo ha dejado de serlo? Ahora bien, al ver el anuncio a doble página que están publicando en los medios, vemos que el proyecto se desinfla por completo y se queda en una operación ingenieril para mantener en pie las paredes que quedan del molino y poco más. El centro de interpretación no sabemos en qué va a quedar. Por otra parte, hacer allí un centro de interpretación de la naturaleza y en el parque de la Juventud (que no en la plaza, como dicen siempre últimamente nuestros políticos) un centro de interpretación del Tajo, ambos de temáticas similares a cincuenta metros de distancia, nos parece que no es la mejor manera de aprovechar los recursos económicos, aunque consigan presupuesto para ello, pues hay que utilizar el dinero de una manera racional y eficaz.
Es evidente que ni los vecinos particulares ni las asociaciones tenemos los conocimientos técnicos ni económicos suficientes como para decidir el futuro de nuestras ciudades, pero siempre podemos aportar sugerencias para el mejor empleo de los recursos y el mayor disfrute de los ciudadanos, dado que cada día lo vivimos a pie de calle, y algo mejor irían las cosas si se promoviera nuestra participación, cosa que ustedes dicen hacer pero que no hacen.
Eso es actual. Ya inicoada l segunda fase de los pisos en camino afligidos. De puede comprobar que hamCOGIDO E INVADIDO. PARTE DE LA VIA PECUARIA.
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