viernes, 15 de mayo de 2020

Carta de apoyo a los trabajadores despedidos de la Fundación Nº 1

Nos cuesta trabajo entender por qué este Ayuntamiento quiere cerrar el único Centro Especial de Empleo que existe en Alcalá estando el país confinado por el Estado de Alarma decretado el 14 de marzo por el Gobierno central, o quizás precisamente por ello, pensando que las justas protestas de los trabajadores no tenga mayor alcance mediático aprovechando las terribles consecuencias para la sociedad que nos está dejando esta pandemia.

Para los vecinos que no lo sepan, la Fundación Nº 1 de Alcalá de Henares, anteriormente Fundación Arco Iris, es una entidad sin ánimo de lucro cuyo objetivo es favorecer la integración social y laboral de personas discapacitadas mediante la formación y creación de empleo estable y digno. Está ubicada en la carretera M-300, km. 25, subiendo hacia el Gurugú a la izquierda, detrás del Centro de Arte-sanía, y hasta la fecha daba trabajo a 35 personas de las que 27 tienen alguna diversidad funcional.

Su actividad principal consiste en la producción de todo tipo de manipulados manuales e industriales y para su mantenimiento reciben subvenciones legalmente establecidas, tanto de la Comunidad de Madrid como del Ayuntamiento de Alcalá, y dependen orgánicamente del Ente Público Empresarial “Alcalá Desarrollo”.

Aún nos resulta más incomprensible este cierre y despido de los trabajadores viniendo de un Gobierno municipal que se autocalifica de progresista, ya que esta Fundación nº 1 no es una empresa mercantil al uso. Sus objetivos no son puramente económicos (obtener beneficios) sino, como decimos, la promoción e integración laboral y profesional de personas discapacitadas en el mundo laboral, algo que las leyes de la política social que nos hemos dado los españoles amparan y promueven.

El pasado 7 de abril, los componentes del Patronato que dirige la Fundación, que preside el Alcalde y tienen representación todos los Grupos Municipales, el sindicato UGT y diversas empresas colaboradoras, aprobaron por mayoría iniciar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de extinción. A este ERE se opusieron Unidas Podemos y Partido Popular, que presentaron proyectos alternativos para mantener los puestos y evitar el cierre sin conseguirlo.

Finalizado el período de consultas el 8 de mayo sin acuerdo entre el Patronato y los trabajadores, a nosotros nos queda un regusto amargo y nos surgen preguntas. ¿Habrán negociado de buena fe? ¿Por qué no se consensuó un plan de viabilidad que no pase por el cierre y los despidos? ¿Que garantías tendrán los trabajadores de encontrar otro trabajo acorde a su discapacidad? ¿Nada de esto pudo aclararles el Patronato? Pues al parecer no hubo respuestas y será al final la autoridad laboral quien decida. ¡Qué pena!

La Asociación Vecinal EL VAL siempre hemos defendido y promovido los servicios sociales públicos y necesarios para nuestra comunidad. Por ello lamentamos el cierre de la Fundación Nº 1 y el despido de sus trabajadores y trabajadoras. Hemos participado en sus protestas y manifestaciones y ya solo nos queda expresarles nuestra solidaridad y apoyo, a ellos y a sus familias, en la confianza de que su justa lucha se vea recompensada al menos con el mantenimiento de todos los puestos de trabajo y la garantía de cobrar cuanto antes los salarios atrasados.

De confirmarse este despido colectivo de personas con discapacidad en el Estado de Alarma sería el primero de estas características en la Comunidad de Madrid. ¿Seguro que el Ayuntamiento no puede hacer algo más? ¿La Comunidad de Madrid tampoco? Veremos.

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