Incongruencia, insensibilidad o...

¿Qué contamina más, una paella o una gran hoguera?

A través de los 26 años de existencia de la Asociación de Vecinos “El Val”, hemos asistido (y seguimos asistiendo) a actuaciones contradictorias con diversas concejalías de nuestra ciudad. Y nos explicaremos en dos casos muy concretos, porque las divagaciones no llevan a ninguna parte: la paella solidaria y las hogueras de San Juan.

A finales del pasado mes de mayo, se celebró la “SEMANA DE LA SOLIDARIDAD, POBREZA Y EXCLUSIÓN SOCIAL” organizada por la Concejalía de Cooperación e Integración, Familia, Salud y Servicios Sociales. Entre los actos a desarrollar, hubo una propuesta de preparar una PAELLA SOLIDARIA en la Plaza de Cervantes el domingo 26. Además de ser un acto de integración, relación, sensibilidad, los donativos recibidos por la ración de paella se entregarían a una OGN con sede en Alcalá para ayudar a la financiación de un proyecto.

La citada Concejalía avisó de que se suspendía la paella dado que Medio Ambiente de Alcalá denegaba el permiso por motivos de contaminación en la ciudad y proponía un BOCADILLO SOLIDARIO encargándose la misma de buscar entidades colaboradoras para que se llevara a efecto. Curiosamente hemos tenido una primavera generosa en lluvias, vientos, frío, que limpiaban constantemente la atmósfera alcalaína.

Escaramuza del Zulema en la plaza

Se preparó el BOCADILLO SOLIDARIO y se empezó a distribuir. Pero estando en ese menester, aparecieron desfilando por la Plaza de Cervantes tropas del ejército francés (napoleónicas) y supuestos alcalaínos de la época. Al llegar a las ruinas de Santa María se enzarzaron en la recreación de la “Escaramuza del Zulema” efectuándose gran cantidad de disparos de armas de fuego atronando el ambiente y llenándolo de humo de pólvora (contaminación acústica y atmosférica con el consiguiente susto para cigüeñas del entorno). Y no es que estemos en contra de la rememoración de ciertos eventos históricos, ni muchísimo menos. Creemos que es una manera de no perder nuestra historia y en especial la local y atraer ciudadanos foráneos para mejorar de paso la maltrecha economía  por el cierre de industrias en la zona.

Y es una pena que la intendencia que ofrecíamos a tropas y espectadores (bocadillo solidario con bebida incluida) no tuviera mucho éxito entre ellos. Debió de ser el apasionado fragor de la lucha que encubrió la necesidad comer y eso que era la hora apropiada.

En eso consistía una incongruencia: no permitir preparar una paella solidaria y sí un espectáculo de fuego y humo.

Segunda incongruencia:  llega la celebración de la NOCHE DE SAN JUAN, noche más corta del año, noche de alegría, de amor y noche de la hoguera donde muchos arrojamos todas las cosas negativas que se nos ocurren para purificar nuestras mentes y con el deseo de que se purifiquen tantos y tantos que están haciendo mucho daño a nuestra sociedad. Esperando que el “fuego purificador” limpie la faz de la tierra de corrupciones, inmoralidades y otras cosas y se extienda la justicia, solidaridad, el trabajo, la ética y los buenos usos de la economía.

Para nuestra sorpresa, (insistimos en que es bueno que permanezcan tradiciones ancestrales) se anuncia en el Distrito V la HOGUERA DE SAN JUAN a las 24 horas del día 23. Curiosamente se suspende por  Medio Ambiente una paella solidaria que contaminaría, pero se permite quemar una hoguera con un dragón pintado de rojo (la pintura al arder contamina mucho). Como no es bueno pensar mal, nos imaginamos que ha sido por bien de la sociedad y que a partir de la extinción de las brasas (saltadas por numerosos jóvenes) desaparecerán los problemas de corrupción, oscurantismo, hipocresía, falta de trabajo, etc, etc. Bueno, si es por eso podemos disculparlo, pero o ha habido incongruencia, insensibilidad o ha habido otra cosa. Esperamos que Medio Ambiente de Alcalá sea consecuente y en las Fiestas de Alcalá considere la contaminación acústica y ambiental en el Parque de la Isla ya que ha estado tan diligente en la prohibición de una PAELLA SOLIDARIA.